El incidente ha generado preocupación entre los vecinos, quienes denunciaron que las zanjas abiertas en la zona no cuentan con cintas de seguridad ni señalización adecuada, a pesar de representar un peligro evidente para peatones y, sobre todo, para los niños. Según indicaron, esta situación refleja una falta de medidas preventivas por parte de los responsables de la obra, lo que podría ocasionar tragedias mayores si no se actúa con prontitud.
Asimismo, se hizo un llamado a los padres de familia para que extremen el cuidado de sus hijos en zonas donde se ejecutan obras públicas, ya que estos espacios presentan riesgos constantes por maquinaria, excavaciones y materiales de construcción. La vigilancia cercana puede evitar accidentes como el ocurrido.
Finalmente, los vecinos exigieron que se coloquen barreras de seguridad y señalización visible, a fin de prevenir nuevos accidentes. El hecho ha reavivado el debate sobre la responsabilidad compartida entre los padres y las instituciones encargadas de garantizar la seguridad en las vías en obra.
