Asimismo, el pasado 12 de octubre, se produjeron ventarrones en el sector de Santa Rosa, distrito de Ranracancha, provincia de Chincheros, que dejaron sin techo a dos viviendas. Las familias damnificadas fueron evacuadas por personal de serenazgo y trasladadas a casas de familiares para resguardarse de las lluvias. Las autoridades locales vienen evaluando la magnitud de los daños y coordinan con Defensa Civil para brindar el apoyo correspondiente.
Otro evento similar se registró el martes 14 de octubre en la localidad de Oscupata, distrito de Micaela Bastidas, provincia de Grau, donde una vivienda también resultó destechada, afectando a cuatro personas. Los damnificados fueron evacuados preventivamente para evitar mayores riesgos. Pobladores de la zona indicaron que los vientos fueron tan fuertes que también dañaron árboles y cables eléctricos, lo que generó temor entre la población.
De acuerdo con el pronóstico del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), estos fenómenos climáticos podrían continuar en los próximos días en la región Apurímac. Las autoridades exhortaron a la población a mantenerse alerta, reforzar sus techos y evitar exponerse a zonas de riesgo, mientras se coordinan acciones de respuesta y apoyo a las familias afectadas.